La acepción que se tiene la palabra unobtainium difiere según la época y el contexto en que
se utilice. En todos los casos sin embargo se utiliza el mismo término, que quiere decir
«inobtenible», es decir, el material que no se puede obtener.
En la rama de la ingeniería el término apareció por primera vez en la década de
los 50, cuando los ingenieros denominaban así a los materiales que eran muy costosos o inusuales.
También se utilizaba el termino unobtainium
cuando en la teoría se describía un material absolutamente perfecto para sus propósitos pero que
era literalmente imposible de conseguir: no existía. Más tarde los ingenieros usaron el concepto
como disfemismo para describir elementos que sí que existían pero que eran muy difíciles de obtener
debido a cualquier tipo de causa, como por ejemplo el titanio. Este material siempre ha soportado
altas temperaturas y ha resultado muy útil sobre todo en la construcción de aviones. Sin embargo
eran los soviéticos los que controlaban los recursos naturales de este elemento y privaban a los
americanos durante la guerra fría del acceso a dicho material, por lo que estos empezaron a
llamarle Unobtainium.
En el ámbito de la literatura el término aparece en numerosas ocasiones. Hace
referencia nuevamente a un material con prodigiosas propiedades que es a su vez único o muy difícil
de conseguir. Suele estar presente en el género sobre todo de la ciencia ficción y de la novela
fantástica. Ejemplos de unobtainium son el adamantium (hace aparición en muchos cómics de
Marvel, incluyendo X-Men), el aluminio transparente (Star Trek IV), el carbonadium
(tan duro como el adamantium pero más flexible; también presente en varias obras publicadas
por Marvel), la carbonita (en Star Wars, Darth Vader lo utiliza para congelar a Hans Solo),
el diamondillium (creado por el Doctor Wernstrom en la serie Futurama), el dilitium
(en Star Trek se utiliza como fuente de energía para reactores materia/antimateria en motores de
curvatura), el energón (combustible para los Transformers), la kryptonita (único
elemento capaz de debilitar a Superman), el mithril (mezcla de plata y platino en las
novelas de El Señor de los Anillos de Tolkien), el naquadah (Stargate), el uru
(material del martillo de Thor), el vibranio (Los 4 fantásticos) o el acero kacchin
del mundo de Bola de Dragón, entre muchos otros.
En la actualidad los ingenieros de la NASA americana han diseñado un material a
prueba de deformaciones cuando se expone a temperaturas enormemente bajas. La idea es formar un
chasis de dicho material que permita a un telescopio situado en un cohete observar el rango del
infrarrojo del espectro electromagnético en el Sol sin deformarse debido a las tensiones del
lanzamiento y a las bajas temperaturas espaciales. Después de muchas pruebas y tests formaron el
chasis a partir de dos componentes, combinando resinas de fibra y ester de cianato. Al resultado le
han llamado unobtainium.
En la tabla periódica de los elementos también hay una referencia al
unobtainium. El elemento 66, llamado disprosio, tiene su origen en la palabra griega
dysprositos, que significa «difícil de conseguir». |